TipologÃa de los micromachismos
Torralba-Borrego y Garrido-Hernansaiz (2021), a partir del trabajo de Bonino (2004) han realizado la siguiente categorización sobre los micromachismos:
Coercitivos-Utilitarios
Su objetivo es doblegar por medio de la fuerza a la mujer ya sea por medios psicológicos, morales o económicos, consiguiendo limitar su libertad, su tiempo como su espacio, algo que finalmente mina su capacidad de decisión.
A continuación, describiremos sus distintas formas de expresión tomando como ejemplo extractos del libro, El Consentimiento de Vanessa Springora (2020):
Intimidación
Cuando se teme a la pareja porque esta es una persona agresiva.
Control de la economía personal
Generando dependencia económica en la mujer. Haciendo que sea el hombre quien tome las decisiones económicas o limitando el acceso de la mujer al dinero.
No participación en lo doméstico
Apoyándose en este caso en los roles de género tradicional, este tipo de expresión utilitaria consigue que la mujer asuma que el cuidado del hogar es única y exclusiva responsabilidad suya.
Uso libre del tiempo y espacio para el hombre
Considerándose que es su derecho la forma como administra y hace uso del tiempo.
Un ejemplo, "Dos de cada tres veces espero sentada en uno de esos restaurantes caros hasta que el señor se digne a aparecer. A veces viene el camarero a decirme que mi "papá ha llamado diciendo que se retrasará media hora"(...)."
Insistencia
Una estrategia que tiene por objetivo el agotamiento de la otra persona para que finalmente ceda.
Un ejemplo, "En un principio no me atrevo a contestarle. Pero G. no es un hombre que se desanime por tan poco. En ocasiones me escribe dos veces al día."
Sus opiniones y sus acciones tienen más valor que las de su pareja
Imponiendo elecciones, ideas o conductas, sin valorar la opinión de su mujer.
Un ejemplo: "Luego, a fuerza de pedírmelo, acabo armándome de valor. Escribo una respuesta mojigata y arisca, pero a fin de cuentas una respuesta. Acabo de cumplir catorce años. Él tiene casi cincuenta. ¿Y qué?"
Encubiertos
Describen aquellas acciones que llevan a que las mujeres pierdan autonomía, adquiriendo gracias a ello más poder en la relación. Se hace uso del afecto como señalan Torralba-Borrego y Garrido-Hernansaiz (2021), para orientar las acciones de la mujer en un sentido u otro. Esto consigue que la mujer termine sintiéndose culpable, impotente y confusa frente a lo que está pasando. Este tipo de micromachismo se manifiesta a través de:
Abusar del rol tradicional de la mujer
Manipulación afectiva
Manipulación de la comunicación
Desautorización
Algo a través de descalificaciones o atribuirse méritos como si fueran propios y que lleva a reforzar el rol de superioridad en la relación.
Ejemplo:
- Dime, ¿has hecho la redacción? Podría ayudarte, ¿sabes? Estás retrasándote.
- No, te preocupes, yo lo he pensado, la haré luego
- Pero ¿por qué?, ¿no quieres que te eche una mano?
- (...)
- Al día siguiente, entrego la redacción a mi profe de lengua, muerta de vergüenza.
- (...)
- cuando nos devuelve los trabajos exclama (...) ¡esta semana te has superado!
- (...)
- Después, a G. nunca le interesará mi diario, no me animará a escribir ni me instará a encontrar mi camino.
- El escritor es él.
Paternalismo
Autojustificación
En crisis
Tiene por objetivo que permanezca el desequilibrio de poder cuando ven que la mujer está empoderada o cuando el hombre está en crisis, (Bonino, 2004). Se manifiestan a través de:
Hipercontrol
Pseudoapoyo
Resistencia pasiva y distanciamiento
Rehuir la crítica y la negociación
Promesas
Victimismo
Hacerse víctima de los distintos reclamos y empleando la culpa como una forma de sometimiento.
Dar lástima
Darse tiempo
Ejemplo: "Cuando le pido explicaciones, me dice que son fans que lo han seguido por la calle (...). Luego me dice que tiene que marcharse, esta vez a Bruselas, donde le han invitado a firmar a una librería y va a firmar en una librería. (...) Pero dos días después, el sábado, caminando por la calle con una amiga, lo veo del brazo de una chica joven en la acera de enfrente a la mía".
Te vamos a pedir que leas el siguiente diálogo, forma parte de la película "Solo una vez" (Ríos Bordón, 2021) basada en la obra teatral homónima de Buchaca (2018) y que respondas de forma posterior a las preguntas que se encuentran al final del mismo:
- Eva: Está apático, está deprimido.
- Pablo: Porque estoy bloqueado porque estoy escribiendo una novela y tengo mucha presión
- Terapeuta: Pero eso no es su culpa
- Pablo: Pues yo también diría muchas cosas que mejoraría de ella y me las callo.
- Terapeuta: Pues dilas, dilas aquí, aquí estamos para eso.
- Pablo: A mí, me gustaría que fuera más positiva cuando leyera mis novelas y mis trabajos
- Eva: Siempre soy positiva
- Pablo: Estamos diciendo la verdad, ¿no? Hemos venido a decir la verdad, pues di la verdad, no te gusta una m..... lo que escribo. Cuando leyó el original de Luis Redondo no hablaba de otra cosa, ¿y mi última novela cuánto has tardado en leerla? ¿Cuánto? ¿Un mes?
- Eva: Porque me la pasaste cuando nos teníamos que ir a la feria del libro, iba de c... y tiene 700 páginas
- Pablo: Ah, no me j....., el problema es que es larga ahora, ¡no me j.... Eva!
- Terapeuta: Perdona, no grites
- Pablo: No y ahora lo que voy a escribir son novelas de 200 páginas como un niño de protagonista, claro que sí. La novela de Luis Redondo es una m.....
- Eva: Es humana, sabe hablar de sentimientos, sabe emocionar.
- Pablo: por allí no vayas
- Eva: Es que eres un escritor frío, pero eso no es malo Pablo.
- Pablo: ¿Y por qué hablamos de cómo escribo yo ahora?
- Terapeuta: Porque es un tema importante que has sacado tú.
- Pablo: No, perdón, no saqué este tema. Yo dije, lo que yo mejoraría de ella.