Promoción de la salud en el trabajo: objetivos y beneficios
No obstante, a pesar de que implantar de forma exitosa un programa de promoción de la Seguridad y Salud en el Trabajo reporta, como hemos visto, numerosos beneficios, se deben enfrentar ciertos desafíos, entre otros:
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Falta de recursos: La implementación de un programa efectivo requiere tanto recursos humanos como económicos, lo que puede ser un obstáculo para algunas organizaciones, especialmente si se requieren nuevas iniciativas, tecnologías o instalaciones.
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Cambios culturales, referidos tanto a la cultura de la organización como a los propios trabajadores. Si la cultura de la organización y de los trabajadores se encuentra muy alejada de la necesaria para implantar con facilidad un programa de Promoción de la Salud en el Trabajo se necesitará el liderazgo de la alta dirección y una importante campaña de sensibilización a todos los niveles jerárquicos. En este sentido, no hay que perder de vista que siempre aparece cierta resistencia al cambio que hay que gestionar, y que los cambios culturales suelen requerir tiempo, así que es conveniente aceptar que en estos casos nos encontramos ante una carrera de fondo.
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Evaluación y monitoreo: Es necesario realizar un seguimiento y evaluación constante del programa para garantizar su efectividad y hacer ajustes según sea necesario
4
Dificultades para medir el impacto: Puede ser difícil medir el impacto de un programa de Promoción de la Seguridad y Salud en el Trabajo, especialmente en términos cuantitativos.
5
Sistema de Gestión de la Seguridad y Salud en el Trabajo poco desarrollado, poco integrado en la gestión general o falta de estructura preventiva en la organización: Como hemos visto anteriormente, contar con un SGSST bien implantado en la organización facilita enormemente la aplicación de la Promoción de la Salud en el trabajo, reduciendo los inconvenientes que hemos visto hasta ahora. Si contamos con un SGSST podremos aprovechar los recursos, estructuras organizativas, sistemas de monitoreo, algunos indicadores, etc. del mismo, y además, con su implantación ya se habrán conseguido parte de esos cambios culturales necesarios para la correcta implantación de un programa de PST.
En resumen, para lograr crear programas de Promoción de la Salud en el Trabajo efectivos se debe conseguir la participación de todo el personal de la organización, incluida la alta dirección, se debe integrar la PST en las decisiones importantes y en todas las áreas de organización y se deben aplicar medidas integrales, que no solo actúen sobre los individuos, sino también sobre el ambiente, de forma que se desarrollen factores de protección y de mejora de la salud.