Si nos dirigimos a un destinatario desconocido podemos utilizar fórmulas genéricas. Se evitará en lo posible el uso de expresiones anticuadas (por ej. Muy señor nuestro) y el abuso de construcciones dobles que puedan hacer tediosa la lectura. Los encabezamientos más comunes son, entre otros:
Estimado señor
Escribimos dos puntos después del tratamiento de respeto (señor) y una línea de blanco para empezar después con mayúscula.
Estimado señor:
Le escribo para confirmarle lo que hablamos en la reunión.
Estimada señora
Volvemos a escribir dos puntos después del tratamiento de respeto (señora) y una línea de blanco para empezar después con mayúscula.
Estimada señora:
Le escribo para confirmarle lo que le comenté en la reunión.
Estimado/a señor/a
Estimado/a señor/a:
Le escribo para hacerle llegar mi currículo.
Los tratamientos de respeto se escriben en minúscula si están escritos con todas sus letras.
Aunque es muy habitual encontrarlo escrito, es incorrecto escribir:
Estamos esperando a la Señora Alves o Llega Don Juan.
Estimado señor
Los tratamientos genéricos cuando no acompañan nombre no deben escribirse abreviados: debemos escribir señor/señora sin abreviar.
Estimado señor:
Me pongo en contacto con usted por el asunto de la devolución de la Renta 2020.
Esta píldora formativa está extraída del Curso online de Aprende a redactar e-mails perfectos.
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