Pautas para enfrentarnos al folio en blanco

Todos los días no estamos plenamente inspirados, así que es conveniente seguir unas pautas para tener temas en la recámara por si algún día no sabemos sobre qué escribir:

Batería de ideas

Dedica un día a hacer una lista sobre los temas que puedes abordar. Piensa para quién debes escribir y en todo lo que le rodea: información sobre el sector, el producto o servicio que vende, algún evento relacionado, sus proveedores, comunicados de prensa de la empresa, lanzamientos, etc.

Es importante que haya variedad. Si solo escribes sobre lo bueno que eres, que eres el mejor frente a la competencia, que has presentado esto o lo otro, el lector se aburrirá y no te leerá. Ponte en los zapatos del consumidor y piensa en cosas útiles e interesantes para él.

Ejemplo: Si redactas para una óptica, no escribas solo sobre el nuevo modelo de la marca "x" de gafas de sol. Puedes hablar también de la importancia de proteger a nuestros ojos de los rayos ultravioleta.

Truco: Si ves que el tema que vas a tratar es muy amplio, divídelo en dos o tres partes. Además de crear expectación en el lector avanzándole que continuará, tendrás material para dos o tres días.

Calendario de publicación

Una vez tengas una lista de temas sobre los que quieres escribir, será el momento de hacer un calendario de publicación. En él podrás ir poniendo cada día que tengas que publicar, el tema sobre el que vas a tratar. Con una palabra o frase sobre la idea del texto será suficiente para recordarlo el día que vayas a redactar.

Este calendario tendrá varias características:

Ahorra tiempo

Al tener programados temas con anticipación, no tienes que perder el tiempo en pensar "qué escribo hoy".

Es clarificador

Si tienes alguna duda, siempre podrás consultar tu calendario o si se te ocurre algo, podrás agregarlo. Algo muy útil si llevas varias cuentas de diferentes entidades.

Es flexible

Si el día que tienes preparado un tema surge otro por actualidad o porque la empresa quiere comunicar algo, podremos pasar ese contenido que teníamos programado a otro día.

Escribe varios temas

Cuando vayas a redactar sobre un cliente, aprovecha para redactar varios temas o para más de un día y así guardar alguno para otra ocasión (que podremos añadir a nuestro calendario como 'hecho').
Esto te permitirá:

Menos estrés

Ir más relajado por la vida y con menos estrés, algo que te mejorará el humor y el carácter. Todo redactor pasa por momentos en los que las musas pasan de largo, algo que nos puede poner muy nerviosos. No te preocupes, las musas, como las oscuras golondrinas, volverán.

Más eficiente

Ser más eficiente, ya que cuando te pones a escribir sobre un sector en concreto, es más fácil que se te ocurran otras publicaciones relacionadas. Seguramente tu mañana será más productiva que si escribes sobre un cliente, luego sobre otro, etc. Piensa a medio plazo.

Cómo enfrentarnos al folio en blanco