¿Qué es el ciclo contable?
Podría decirse que el ciclo contable es el conjunto de operaciones que realiza una empresa durante un ejercicio económico.
En uno de los vídeos de la unidad anterior se observaban ejercicios económicos de duración bimensual, anual y trienal. También se hablaba de la necesidad de homogeneizar la duración de dicho ejercicio económico. Pues bien, tanto la legislación fiscal (impuestos que gravan el beneficio) como la mercantil (obligaciones con el Registro Mercantil) han situado en un año esta duración.
Durante cada ciclo contable, la empresa realizará una serie de actividades, de forma repetitiva, que conducirán a que registre todos los hechos contables que afectan a su patrimonio. Estas actividades se resumen en 7 fases:
El ciclo contable comienza con la confección del inventario inicial, que no es sino un informe que contiene una relación detallada de todos los bienes, derechos y obligaciones de la empresa, el primer día del ejercicio económico o el día del inicio de su actividad. En la práctica, se toman los mismos datos que contiene el balance final del ejercicio anterior.
A continuación, y tomando los datos del inventario inicial, se efectuará el asiento de apertura, anotando en el debe los saldos de las cuentas de activo y en el haber los saldos de las de pasivo y neto. Este asiento se registrará en los libros Diario y Mayor, que quedan así dispuestos para la contabilización de las operaciones del día a día de la empresa.
A lo largo del ejercicio económico se irán registrando, día a día, en los libros Diario y Mayor, todas las operaciones relativas a la actividad de la empresa. Las unidades 5ª a 9ª del curso estudian estas operaciones.
Periódicamente (mensual o trimestralmente) se deberá elaborar un informe denominado balance de comprobación. Este balance no es sino una lista de TODAS las cuentas contables de la empresa, con su código, denominación, sumas y saldos. La finalidad de este informe es doble:
a) Obtener información del patrimonio de la empresa con una cierta periodicidad.
b) Detectar posibles errores contables para su corrección.
Tras registrar la última operación del año, relativa a la actividad de la empresa, el contable debe contabilizar las llamadas operaciones de regularización. Estas operaciones, que se registran el último día del ejercicio económico, están detalladas en la 10ª unidad del curso y pretenden un doble objetivo:
a) Que la contabilidad refleje la imagen fiel del patrimonio (situación financiera) de la empresa.
b) Que la contabilidad refleje el resultado (situación económica) del ejercicio económico y las causas que lo han originado.
Una vez registrados los asientos de regularización en los libros Diario y Mayor, sólo tendrán saldo las cuentas patrimoniales (grupos 1 a 5). Pues bien, se procederá a saldarlas mediante un asiento contable, denominado de cierre, que finalizará los libros Diario y Mayor. En este asiento se reflejará el inventario final de la empresa. Tras su contabilización, no podrá registrarse ya ninguna otra operación en el ejercicio económico.
Por último, se elaborarán unos informes que resumen la contabilidad del ejercicio. Estos informes, llamados cuentas anuales, se analizan en las unidades 11ª y 12ª y son:
a) Balance de Situación.
b) Cuenta de Pérdidas y Ganancias.
c) Memoria.
d) Estado de Cambios en el Patrimonio Neto