Los requisitos nutricionales varían a lo largo de la infancia y la adolescencia debido a los diferentes ritmos de crecimiento y desarrollo de los niños.

Comprender estas variaciones es esencial para diseñar menús infantiles equilibrados y saludables.

Aquí hay algunas pautas generales para diferentes grupos de edad:

Lactantes (0-12 meses)

Durante el primer año de vida, los lactantes dependen principalmente de la leche materna o la fórmula infantil.

Estos proporcionan todos los nutrientes necesarios, incluidos proteínas, grasas, carbohidratos, vitaminas y minerales.

La introducción de alimentos sólidos generalmente comienza alrededor de los 6 meses.

Alimentos que pueden consumir (a nivel general):

  • Leche materna (o fórmula infantil si es necesario).
  • Purés de frutas y verduras suaves y cocidos.
  • Cereales infantiles enriquecidos con hierro (arroz, avena, cebada).
  • Carne molida o puré de carne cocida.
  • Yogur natural para bebés (a partir de los 6 meses).

Preescolares (1-5 años)

Los niños en esta etapa necesitan un equilibrio adecuado de proteínas, carbohidratos, grasas, vitaminas y minerales para respaldar su crecimiento y desarrollo.

Es fundamental introducir alimentos ricos en hierro, calcio y fibra.

Alimentos que pueden consumir (a nivel general):

  • Leche (preferiblemente leche entera hasta los 2 años).
  • Frutas y verduras frescas o cocidas.
  • Cereales integrales (avena, trigo integral, quinua).
  • Carne magra (pollo, pavo, ternera magra).
  • Pescado bajo en mercurio (salmón, trucha, tilapia).
  • Legumbres (lentejas, garbanzos, frijoles).
  • Huevos (cocidos o preparados de manera saludable).
  • Yogur bajo en azúcar.
  • Queso bajo en grasa.

Escolares (6-12 años)

Durante esta etapa, los niños experimentan un crecimiento constante y requieren una variedad de alimentos para satisfacer sus necesidades nutricionales.

Es importante fomentar hábitos alimenticios saludables y equilibrados.

Alimentos que pueden consumir (a nivel general):

  • Una amplia variedad de frutas y verduras.
  • Granos enteros (pan integral, arroz integral, pasta integral).
  • Proteínas magras (pollo, pavo, pescado, carne magra, tofu).
  • Legumbres (para obtener proteínas y fibra).
  • Lácteos bajos en grasa o alternativas lácteas.
  • Frutos secos y semillas (en porciones pequeñas debido a alergias).
  • Aceite de oliva y otras grasas saludables.

Adolescentes (13-18 años)

Durante la adolescencia, los requerimientos nutricionales aumentan significativamente debido al crecimiento acelerado y los cambios hormonales. Los adolescentes necesitan un mayor aporte de proteínas, calcio y hierro. También es crucial para ellos obtener suficientes vitaminas y minerales, como el folato y la vitamina D.

Alimentos que pueden consumir (a nivel general):

  • Los mismos alimentos mencionados para los grupos anteriores, con una mayor énfasis en la variedad y la calidad nutricional.
  • Mayor consumo de proteínas magras para respaldar el crecimiento y el desarrollo.
  • Introducción de alimentos ricos en hierro, calcio y otros nutrientes esenciales debido a las necesidades nutricionales aumentadas durante la adolescencia.
  • Mayor consumo de frutas y verduras para obtener vitaminas y minerales esenciales.
  • Fomento del consumo de granos enteros para la fibra y los nutrientes.
  • Conciencia sobre la importancia de una hidratación adecuada, preferiblemente a través de agua y limitando las bebidas azucaradas.

Es esencial tener en cuenta las diferencias individuales en las necesidades nutricionales de los niños y adolescentes, como sus niveles de actividad, su salud general y posibles restricciones dietéticas.

También es importante destacar la importancia de una alimentación equilibrada que incluya una variedad de alimentos de todos los grupos alimenticios.

Al diseñar menús infantiles, se debe considerar cuidadosamente cómo satisfacer las necesidades nutricionales específicas de cada grupo de edad y fomentar hábitos alimenticios saludables desde una edad temprana.

Esto garantizará un crecimiento y desarrollo óptimos y ayudará a prevenir posibles problemas de salud relacionados con la nutrición en el futuro.

Respecto a los alimentos que estas etapas pueden consumir es importante destacar que los niños pueden tener preferencias alimenticias individuales y alergias alimentarias, por lo que es fundamental adaptar la dieta de acuerdo con sus necesidades específicas. Además, es esencial fomentar hábitos alimenticios saludables y una relación positiva con la comida desde una edad temprana para promover una alimentación equilibrada a lo largo de la vida.

 

Esta píldora formativa está extraída del Curso online de Diseño de menús infantiles (SANP010PO).

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